Como he comentado otras veces, nosotros somos los únicos
creadores de nuestra experiencia vital, independientemente de las
circunstancias que nos rodean. Es más, las circunstancias que nos rodean las
hemos atraído hacia nosotros con nuestros pensamientos, tanto si somos
conscientes de ello como si no. Henry
Ford dijo: “Tanto si crees que puedes
, como si crees que o puedes, estas en lo cierto”.
No debemos quejarnos de nuestra situación actual, sea cual
sea, ya que la hemos propiciado nosotros bien sea pensando en ella o bien
pensando que no queríamos llegar a ella. El hecho de quejarnos, simplemente
añade más leña al fuego, más pensamientos indeseados, lo cual se traduce en
perpetuar nuestra situación actual e incluso empeorarla.
¿Qué debemos hacer?
Algo muy sencillo, cambiar poco a poco nuestros pensamientos
dominantes, dejar de pensar en las cosas que no nos gustan y que nos generan
sentimientos de preocupación, tristeza, etc.
Hemos de centrar nuestra atención en lo que deseamos vivir,
¡ojo!, no en lo que “desearíamos”, sino en lo que deseamos, con toda la fé,
porque sin ninguna duda, lo atraeremos hacia nosotros hasta que forme parte de
nuestra experiencia.
Es importante hacer algunas matizaciones para que nuestro
“trabajo” sea eficaz. En primer lugar al centrar nuestros pensamientos en las
cosas que deseamos tener o vivir, hemos de hacerlo con la seguridad de que lo
vamos a conseguir y esa misma seguridad será la que nos permitirá tener buenas
sensaciones, las cuales nos indican que estamos en el camino correcto.
Bajo ningún concepto hemos de permitirnos pensamientos de
que aún no tenemos algo que deseamos o de que nuestra vida aún no es tal como
deseamos, puesto que este tipo de pensamientos nos alejan de nuestro deseo, o
bien, retrasan su llegada. Las personas y/o cosas que deben ponerse en nuestro
camino para conseguir nuestros deseos, no aparecerán o igual si, pero no
estaremos preparados para ver las oportunidades que nos traen, que nos
permitirán llegar a conseguir nuestro objetivo principal.
En resumen podemos concluir que nosotros somos los creadores
de nuestra existencia, debemos ser muy conscientes de ello y actuar en
consecuencia. Al principio podemos empezar como si fuera un juego de
imaginación, recreándonos cada día en pensamientos agradables relacionados con
nuestros deseos, dediquemos los momentos en que nos sea posible.
Al principio puede parecer que somos unos ilusos soñadores,
pero si persistimos, poco a poco estos pequeños juegos se irán haciendo
realidad, seguramente no en los detalles exactos, pero si en la esencia, que es
lo que realmente hemos deseado.
Esto está en las manos de todos, solo es necesario ponerse
manos a la obra y no desanimarse, somos unos creadores innatos.
Actitud
Mental
Positiva
Cl-Outsourcing

No hay comentarios:
Publicar un comentario